Esta es una guía de consejos para construir tu patrimonio. Cada uno te dará la clave para vivir esos hitos que enriquecerán tu vida: esa maestría que te hará crecer en el mundo laboral; esa casa que tanto anhelas o gestionar tu retiro con inversión. Recuerda que ahorrar no es lo mismo que invertir y es clave que comiences a explorar los fondos de inversión para cumplir esos sueños gracias a tus ingresos.
1. Define tus metas financieras: corto, mediano y largo plazo. Por ejemplo, un viaje en un año puede ser una meta a corto plazo; una maestría en 3 años puede ser una meta a mediano plazo y esa casa que tanto quieres a 8 años puede ser un objetivo a largo plazo.
2. Crea un presupuesto mensual detallado con cada gasto para no perder nada de vista: llevar un registro y catalogar los consumos entre: vivienda, comida, estudios, ropa…e ir analizando para recortar el gasto en exceso que afecta yu patrimonio.
3. Guarda al menos el 10% de tus ingresos para ahorro o inversión. Cada mes guarda este porcentaje para invertir e ir construyendo tu patrimonio gracias al Interés Compuesto.
4. Crea un fondo de emergencia con al menos 3 o 6 meses de tus gastos mensuales. Si perdieras tu trabajo debes tener este respaldo. Mantén ese hábito para después del fondo de emergencia comenzar a invertir para construir tu patrimonio.
5. Usa el débito automático mensual en tus inversiones para no depender de la fuerza de voluntad: haz de cuenta que ese dinero mensual que se debita para inversión no existe. Si no existe no te lo gastas, y en un años verás el rendimiento para cumplir con los sueños.
6. Revisa tus suscripciones: cancela las que no uses. Haz una lista de todas esas suscripciones y deja solo las que uses a diario y te agreguen valor, en especial si son de contenido para seguir aprendiendo.
7. Aprende a diferenciar entre activos y pasivos. Esto te ayudará a entender que tu patrimonio son tus activos (bienes que posees) menos los pasivos (deuda) para entender dónde estás para rentabilizar tus inversiones.
8. Desarrolla el hábito de leer libros sobre finanzas personales. Esto te ayudará a mejorar tu conocimiento sobre el mundo de inversiones y seguir creciendo financieramente.
9. Evita compras impulsivas: espera 24 horas antes de gastar en algo no planificado. Luego de ese tiempo, y si lo ves necesario, regresa al carrito de compras para ver si realmente necesitas ese artículo. Si no sientes la necesidad, no lo compres y destina ese monto a tu fondo de inversión.
10. Revisa tu historial crediticio y trabaja en mejorarlo. Al ser información confidencial debes hacerlo a través de tu banco si dispone del servicio o gratuitamente en este link de la Superintendencia de Bancos.
11. Investiga sobre diversificación y su importancia en la inversión. En inversiones los huevos no se ponen en la misma canasta, por eso es importante entender tus opciones, investigar los fondos de inversión reconocidos y establecidos legalmente en el mercado y entender la rentabilidad estimada de cada producto y el tiempo mínimo de permanencia.
12. El largo plazo es tu aliado: puedes abrir fondos según distintos objetivos con diferentes plazos en el tiempo. Sin embargo, plantea un objetivo mayor de 10 años con un monto interesante que puedas cumplir en el tiempo para ver cómo el interés compuesto hace su magia de rentabilizar tu dinero, gracias a tu constancia.
13. Realiza simulaciones de inversión en el tiempo para ver cómo crece tu patrimonio en el tiempo. En esta página puedes simular: solo debes colocar el monto que deseas aportar, el tiempo que deseas hacerlo y si tienes un monto para empezar a invertir. Puedes hacerlo en nuestra web Mi Objetivo para plantearle ese objetivo que quieres lograr: una maestría, un viaje, comprar una casa, invertir para obtener el 30% de entrada de tu vivienda o simplemente para tu retiro.
14. No busques enriquecerte rápido; invierte con un horizonte a largo plazo. El dinero rápido no existe y los inversionistas más exitosos lo han entendido. Proyéctate en el tiempo e invierte con constancia, que ese esfuerzo será recompensado.
15. El poder del interés compuesto radica en la reinversión constante de las ganancias: no está de más decir que la capitalización diaria sobre el monto de inversión más la rentabilidad proyectada del interés compuesto es la clave para impulsar el crecimiento de patrimonio. Solo necesitas abrir un fondo para construir ese futuro que tanto deseas.